Dia 12. Bandar Abass
Planificamos las proximas horas xq el mercao es muy temprano y no sabemos si nos compensa dormir akí o no. Primero vamos a preguntar a los savari y ya decidimos.
En esta city dan limonada, zumos de limón, naranja, granada, piña, yogur líquido, agua... to fresquito y cada cuatro pasos. Qué ricoooo!!! Nos va bien xq el calor es intenso. Tal cual los bebemos, los sudamos, como fuentes. Marededioss qué caloor!! Y este pañuelo torturador!! Un martirio. Nos pica todo y vamos chorreando por todos los poros. Parecemos penitentes, sólo se nos distingue por los colorines, que akí van de negro riguroso, a veces hasta con el velo que les cubre toa la cara. Han pasao de pinturetas de cera a fantasmas enlutaos. Paice una ciudad llena de cucarachicas.
Akí sí que está to chapao, ya verás, ya, pa comer...
Vamos buscando la estación de savaris pa Minab... bien... imposible!! Esto es un hervidero de gente. Miles de personas en la procesión y por las calles. El plano de la Lonely una caca y los lugareños nos indican, pero que no, que por mucho que preguntamos no hay manera. Al final todos nos dicen que mejor un taxi, san descojonao a pensar!! Pa ese viaje no necesitamos alforjas!!
Hemos leído que si te dicen to recto, es que no tienen ni p idea. Y entonces, cuando haya que ir recto, cómo lo dirán???
Encantadores, eso sí, nos hacen hueco para que saquemos fotos, nos saludan y sonríen sin cesar y nos piden que posemos pa sacarse fotos con nosotras (nos recuerdan mucho a los ceilandeses), se paran a charlar... siempre con una sonrisa en la cara. Qué gusto!!!
Nos hemos metido Victoria y yo en medio la procesión. Chicoooo, qué despliegue de fervooor: cantarines, rezadores, tambores, cofrades, pasos y esos que se arrean con las cadenas de hierro. Y el gentío alrededor, tos apiñaos, viendo la procesión hipnotizados. Una mezcla de sonidos increíble, los sones rítmicos de los tambores, las letanías de los rezadores, el cántico de un muchacho que desfila, los sonidos metálicos y secos de las cadenas de los flagelantes, los murmullos de la gente rezando... También -gracias, dios míooo- hay uno que va pulverizando agua, ahhhh... qué buena!!
Son un poco exageraos, menos mal que tienen probibido beber, que si no, no sé lo que se podría armar akí (amos, como si no fueran exageraos los locos esos qje en España se flagelan hasta sangrar...).
Estamos en el Golfo Pérsico (concretamente en el Estrecho de Ormuz), cómo no vamos a ir a al mar? Pos esta tarde sin falta, aunque... cachisss... no nos hemos traído el burkini. Pos nos mojaremos los pies como las yayas. Así que después de tanto barullo volvemos al hotel pa descansar primero un rato y.... sorpresa!!! Nos obsequian con unas fiambreras: lunch, lunch, for you. Halaa!! Toas preocupadas por si podríamos comer y beber por ser fiesta y nos están empachando por todos laos, como a los patos pal foiegras. Arroz con verduras y tomate. Mu rico. Menuda pucherada!! Ara siesta, que tenemos toa sangre en el estómago, y logo al mar.
Bah, no cogemos agua que nos dan líquido por todos laos.
Akí, la gran seca, la gran remojada. Por la mñna tol mundo en la calle? Pos por la tarde ni un alma, que por no haber, no hay ni borrachos tiraos -evidente, ya, ya-. Está claro que tol mundo tiene casa.
A pesar de la chicharra vamos al paseo marítimo. Pos la beach una caca, sucia y fea. No les daban ni el palo de la bandera. Tanto golfo pérsico ni tanta historia. Decepcionadas nos hallamos. Y sudadas. Y chafadas de calor. Y sin agua!! Y con to cerrao.
Amos, que decidimos volver al hotel antes de quedarnos como mojamas. Cuando tol mundo está en su casa, por algo será. Al caer el sol la calle se convertirá de nuevo en un hervidero.
La verdad es que la city no tiene nada especial, como una ciudad occidental normal -de las sosas-. Hago foto por eso de que hemos estao. Pfff.
Siestorra en el hotel y salimos dispuestas al nuevo bullicio. Ah, pos no!! Sigue to desierto. Pos durmiendo la mona no están. Sólo queda un puesto de zumos. Mmmm... de jengibre. Paice ser que lo de la traca fin de fiestas aquí no se lleva.
Primero localizamos la parada de savaris y luego paseamos un rato. Vamos hablando con gente que se nos junta. Nos sacamos fotos con unos novios que nos han perseguido con una moto, jajjajaa!!! Nosotras espantándolos y ellos que sólo querían la foto. También otro, que cuenta que es capitán de barco, y nos invitaba a su casa. Agradecidas le hemos dicho que no, y eso que hemos leído que tienen costumbre de llevar a extranjeros a sus hogares para hablar con gente de fuera, y que es una oportunidad para verles en su vida cotidiana, y a ellas sin velo. Pero mejor no arriesgamos.
Entramos a cenar un kebab de pollo con arroz y yogur -pshé-, y pal hotel, que mñna el madrugón sera considerable pa estar pronto en Minab.
Planificamos las proximas horas xq el mercao es muy temprano y no sabemos si nos compensa dormir akí o no. Primero vamos a preguntar a los savari y ya decidimos.
En esta city dan limonada, zumos de limón, naranja, granada, piña, yogur líquido, agua... to fresquito y cada cuatro pasos. Qué ricoooo!!! Nos va bien xq el calor es intenso. Tal cual los bebemos, los sudamos, como fuentes. Marededioss qué caloor!! Y este pañuelo torturador!! Un martirio. Nos pica todo y vamos chorreando por todos los poros. Parecemos penitentes, sólo se nos distingue por los colorines, que akí van de negro riguroso, a veces hasta con el velo que les cubre toa la cara. Han pasao de pinturetas de cera a fantasmas enlutaos. Paice una ciudad llena de cucarachicas.
Akí sí que está to chapao, ya verás, ya, pa comer...
Vamos buscando la estación de savaris pa Minab... bien... imposible!! Esto es un hervidero de gente. Miles de personas en la procesión y por las calles. El plano de la Lonely una caca y los lugareños nos indican, pero que no, que por mucho que preguntamos no hay manera. Al final todos nos dicen que mejor un taxi, san descojonao a pensar!! Pa ese viaje no necesitamos alforjas!!
Hemos leído que si te dicen to recto, es que no tienen ni p idea. Y entonces, cuando haya que ir recto, cómo lo dirán???
Encantadores, eso sí, nos hacen hueco para que saquemos fotos, nos saludan y sonríen sin cesar y nos piden que posemos pa sacarse fotos con nosotras (nos recuerdan mucho a los ceilandeses), se paran a charlar... siempre con una sonrisa en la cara. Qué gusto!!!
Nos hemos metido Victoria y yo en medio la procesión. Chicoooo, qué despliegue de fervooor: cantarines, rezadores, tambores, cofrades, pasos y esos que se arrean con las cadenas de hierro. Y el gentío alrededor, tos apiñaos, viendo la procesión hipnotizados. Una mezcla de sonidos increíble, los sones rítmicos de los tambores, las letanías de los rezadores, el cántico de un muchacho que desfila, los sonidos metálicos y secos de las cadenas de los flagelantes, los murmullos de la gente rezando... También -gracias, dios míooo- hay uno que va pulverizando agua, ahhhh... qué buena!!
Son un poco exageraos, menos mal que tienen probibido beber, que si no, no sé lo que se podría armar akí (amos, como si no fueran exageraos los locos esos qje en España se flagelan hasta sangrar...).
Estamos en el Golfo Pérsico (concretamente en el Estrecho de Ormuz), cómo no vamos a ir a al mar? Pos esta tarde sin falta, aunque... cachisss... no nos hemos traído el burkini. Pos nos mojaremos los pies como las yayas. Así que después de tanto barullo volvemos al hotel pa descansar primero un rato y.... sorpresa!!! Nos obsequian con unas fiambreras: lunch, lunch, for you. Halaa!! Toas preocupadas por si podríamos comer y beber por ser fiesta y nos están empachando por todos laos, como a los patos pal foiegras. Arroz con verduras y tomate. Mu rico. Menuda pucherada!! Ara siesta, que tenemos toa sangre en el estómago, y logo al mar.
Bah, no cogemos agua que nos dan líquido por todos laos.
Akí, la gran seca, la gran remojada. Por la mñna tol mundo en la calle? Pos por la tarde ni un alma, que por no haber, no hay ni borrachos tiraos -evidente, ya, ya-. Está claro que tol mundo tiene casa.
A pesar de la chicharra vamos al paseo marítimo. Pos la beach una caca, sucia y fea. No les daban ni el palo de la bandera. Tanto golfo pérsico ni tanta historia. Decepcionadas nos hallamos. Y sudadas. Y chafadas de calor. Y sin agua!! Y con to cerrao.
Amos, que decidimos volver al hotel antes de quedarnos como mojamas. Cuando tol mundo está en su casa, por algo será. Al caer el sol la calle se convertirá de nuevo en un hervidero.
La verdad es que la city no tiene nada especial, como una ciudad occidental normal -de las sosas-. Hago foto por eso de que hemos estao. Pfff.
Siestorra en el hotel y salimos dispuestas al nuevo bullicio. Ah, pos no!! Sigue to desierto. Pos durmiendo la mona no están. Sólo queda un puesto de zumos. Mmmm... de jengibre. Paice ser que lo de la traca fin de fiestas aquí no se lleva.
Primero localizamos la parada de savaris y luego paseamos un rato. Vamos hablando con gente que se nos junta. Nos sacamos fotos con unos novios que nos han perseguido con una moto, jajjajaa!!! Nosotras espantándolos y ellos que sólo querían la foto. También otro, que cuenta que es capitán de barco, y nos invitaba a su casa. Agradecidas le hemos dicho que no, y eso que hemos leído que tienen costumbre de llevar a extranjeros a sus hogares para hablar con gente de fuera, y que es una oportunidad para verles en su vida cotidiana, y a ellas sin velo. Pero mejor no arriesgamos.
Entramos a cenar un kebab de pollo con arroz y yogur -pshé-, y pal hotel, que mñna el madrugón sera considerable pa estar pronto en Minab.
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